Croquetas de cecina y boletus
En mi opinión los ingredientes que mejor funcionan para hacer croquetas son los que tienen un sabor potente ya que la bechamel los suaviza mucho. Por eso me encanta esta receta de croquetas de cecina y boletus porque su aroma intenso te llena en el primer bocado.
Cuando hago croquetas, me gusta empezar dorando los tropezones, después añadiendo y tostando la harina y finalmente ir agregando la leche. Haciéndolo de este modo en lugar de comenzar haciendo un roux, después la leche y finalmente los ingredientes sólidos, se consigue una masa de croquetas con mucho más sabor y sin un solo grumo, como ahora veréis.
Ingredientes para unas 30 croquetas
Un litro de leche entera, (sobrará), 100 gr de cecina en lonchas, 50 gr de boletus congelados o rehidratados, 75 gr de harina, 75 gr de mantequilla, sal, nuez moscada, huevos y pan rallado
Cómo hacer croquetas sabrosas de cecina y boletus
Como os decía, cuando hago croquetas prefiero hacer la masa empezando con los tropezones. Por esa razón, cortamos los boletus en trozos pequeños y comenzamos a saltearlos en la sartén con la mantequilla hasta que estén bien dorados. Añadimos entonces la cecina cortada en taquitos pequeños y la harina, removiendo con la cuchara de palo para que se impregne en todos los tropezones.
Mezclamos bien para que la harina se vaya tostando y vamos agregando la leche en pequeños chorritos que irán desapareciendo conforme los absorba la harina. Poco a poco, y con paciencia seguimos incorporando leche y removiendo.
Seguiremos con este proceso hasta que nuestro “engrudo“ se vaya convirtiendo en una masa densa que iremos rebajando, siempre con pequeños chorritos de leche hasta que esté en el punto que nos guste. Rectificamos de sal y pimienta y añadimos un toque de nuez moscada.
Personalmente me gusta mucho la masa de croquetas bastante fina, teniendo en cuenta que al enfriarse se endurece un poco. Así conseguimos croquetas con la masa casi líquida, pero hay que considerar que serán menos manejables para formar y para freír así que encontrar el punto perfecto es la verdadera cuestión.
Enfriamos la masa en una fuente plana y formamos las croquetas después con dos cucharas soperas o con ayuda de una manga pastelera. Pasamos las croquetas por huevo batido y pan rallado y las freímos en abundante aceite de oliva muy caliente. Escurrimos en papel absorbente y llevamos a la mesa inmediatamente.
Tiempo de elaboración | 30 minutos más el reposo de la masa de croquetas
Dificultad | Media
Degustación
Estas sabrosas croquetas de cecina y boletus son excelentes tanto como aperitivo acompañadas de una cerveza, como para servir de plato fuerte de una cena acompañadas de una ensalada de hojas verdes y si queréis una salsa rosa o un poco de tomate frito. A casi todo el mundo le gustan las croquetas así que con esta variedad, el éxito está prácticamente asegurado.
Autor:
@directopaladar
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